Comunidad de aprendizaje finaliza curso de formación en prácticas educativas inclusivas

En respuesta a las crecientes necesidades de inclusión para personas con discapacidad, la Comunidad de Aprendizaje de las Ciencias Físicas y Matemáticas, perteneciente al Departamento del mismo nombre, ha completado una de sus iniciativas más significativas en esta área: el curso de formación “Fortaleciendo tus prácticas educativas inclusivas para estudiantes con discapacidad y en el espectro autista”.

Este curso se llevó a cabo durante dos meses bajo la modalidad b-learning, concluyendo en el mes de septiembre, combinando 14 horas de formación sincrónica y 26 horas de trabajo autónomo asincrónico. La formación estuvo dividida en cuatro módulos que abordaron temas fundamentales como la normativa internacional, nacional e institucional sobre discapacidad, el diseño universal de aprendizaje, los ajustes razonables y el uso de tecnologías para la inclusión.

El curso fue impartido por Suelen Trecan Cid, profesional de acompañamiento del Centro de Recursos Tecnológicos Inclusivos (CERETI), y contó con la colaboración del Centro de Innovación en Aprendizaje, Docencia y Tecnología Educativa (CINAP). Entre los participantes se destacaron las académicas Mg. Valeria Carrasco Zúñiga, Mg. Soledad Yáñez Arriagada, y los académicos Dr. Emilio Cariaga López y José Luis Barahona Mora.

Durante el proceso formativo surgieron importantes reflexiones sobre los desafíos de la inclusión, así como propuestas concretas para mejorar las prácticas educativas inclusivas en la universidad. Uno de los participantes señaló: “El mayor impacto de esta reflexión surgió al cuestionar mis prácticas de evaluación, que se habían alineado con reglas tradicionales y rígidas. Esta autocrítica me permitió redirigir el enfoque hacia prácticas evaluativas que realmente fomenten el aprendizaje y la inclusión, en lugar de simplemente cumplir con normas formales”.

Al cierre del curso, los resultados de satisfacción reflejaron un 100% de cumplimiento de las expectativas generales, y todos los participantes recomendaron esta formación a otros académicos. Este feedback positivo subraya la importancia de continuar impulsando espacios de aprendizaje orientados a la inclusión.

A futuro, la Comunidad de Aprendizaje proyecta sus esfuerzos en dos líneas principales: difundir propuestas sobre la discapacidad y aplicar ajustes razonables en las aulas, reafirmando su compromiso con una educación universitaria más inclusiva y accesible para todos.